sábado, 17 de octubre de 2009

lugar común


Has tardado siete eclipses
en leer descalzo
los indicios de muerte de tu cama al baño
has necesitado mil y una noches en blanco
para comprender
que lo que sientes en el pecho
no es
la música de las esferas
sino la vida
esa angina que cuando eras adolescente
se jugó a los dados con Dios
tu cuerpo celeste
y ganó
el azar
claro
y ahora eres tan sabio
y tu tos tan ferina
que a tus pies el pasillo es
una senda infinita
el suelo está frío
y andas perdido en la ingenua oscuridad
de tu propio hogar.

4 comentarios:

Li-* dijo...

Al final se llega al final del pasillo -aunque sea atormentadamente-.

-*

Januman dijo...

¿Y si el pasillo no tiene final? ¿y si cada uno vivimos en pasillos paralelos que sólo tienen en común el gélido tacto de su suelo?

Li-* dijo...

Entonces es un círculo. Hazle una ventana-agujero cuando sea el momento. O mientras tanto consigue una alfombra para que no resulte tan frío.

-*

francisco javier casado dijo...

una alfonbra voladora mejor que mejor...