sábado, 22 de diciembre de 2012

raincats

(canto gris gato)

Ojos grises de gato gris
a oscuras brillan
como la ceniza
de un incendio pálido
un día gris / un día gris
todos los gatos agrisados
vienen a mí / vienen a mí

Ojos grises de gato gris
a oscuras buscan
la leche de luna
del río del llanto
un día gris / un día gris
todos los gatos agrisados
vienen a mí / vienen a mí

Ojos grises de gato gris
turbios maúllan
la canción de lluvia
en un muelle vano
un día gris / un día gris
todos los felinos nublados
vienen a mí / vienen a mí


viernes, 7 de diciembre de 2012

corona

DE mi mano come el otoño su hoja: somos amigos.
Extraemos el tiempo de las nueces, le enseñamos a andar:
el tiempo vuelve a la cáscara.

En el espejo es domingo,
en el sueño se duerme,
la boca dice la verdad.

Mi ojo desciende al sexo de la amada:
nos miramos,
nos decimos palabras oscuras,
nos amamos como se aman amapola y memoria,
dormimos como vino en los cuencos,
como el mar en el rayo sangriento de la luna.

Abrazados en la ventana, nos ven desde la calle:
¡es hora de que se sepa!
Tiempo es de que la piedra florezca,
de que en la inquietud palpite un corazón.
Es tiempo de que sea tiempo.

Es el momento.

(Paul Celan: Amapola y memoria)

de tallos de la noche

ELLA peina su pelo como se peina a un muerto:
lleva los añicos azules bajo la camisa.

Lleva los añicos del mundo en una cinta.
Sabe las palabras, pero sólo sonríe.

Mezcla su sonrisa con la copa de vino:
debes beberla para estar en el mundo.

Tú eres la imagen que le muestran los añicos
cuando se inclina pensativa sobre la vida.

(Paul Celan: Amapola y memoria)

martes, 20 de noviembre de 2012

esos desconocidos de los sueños

¿Quiénes son esos visitantes
que aparecen en mis sueños
y cuyos rostros no reconozco?
El hombre que arregla
el neumático de mi automóvil
el director que va a dirigir
mi concierto de viola
o la muchacha del ascensor
a la que beso apasionadamente

Cada noche se presentan desconocidos
que quieren decirme algo
con gestos que no consigo descifrar
O quizás no quieren decirme nada
y sólo son espíritus
de personas que algún día existieron
pero que nunca conocí

O acaso prefantasmas
que mañana encarnarán en un cuerpo
y que usan el escenario de mis sueños
para ensayar su papel en el mundo

¿Qué yo mío es ése que posee su propia memoria
y no es la del hombre que está en la cama?
O quizás los desconocidos quieren decirme
dónde están enterrados mis cuerpos
de otras reencarnaciones
con qué nombre y en qué país

No lo sé. Tan sólo sé que anoche
soñé con un enorme cementerio
en el que nunca estuve
y que puse flores en una tumba

(Óscar Hahn)

domingo, 18 de noviembre de 2012

no es cierto

No es cierto que vengamos a este mundo a vivir;
venimos sólo a soñar.

(Poema azteca, anónimo)

sábado, 20 de octubre de 2012

trofeos

Porque yo soy poeta
incluso cagando
quiero dar,
os doy,
una poca de mierda.

La demás para mí.

(Fernando Merlo: Escatófago)

error a error

Error a error.
A errorazos sordos. A golpes
por la errada carretera.
Errando.
Andando sobre errores.
Disimulando
la cara errada maquillada a yerros.

(Fernando Merlo: Escatófago)

somos gusanos

Somos gusanos
de gusana madre.

Una gusanera en la garganta
y otra en la sangre.

(Merodean los gusanos
con un terrible olor a carne.)

(Fernando Merlo: Escatófago)

viernes, 12 de octubre de 2012

aveja y escorpión

Desde su helado submundo de piedra, el escorpión trata de imaginar el fantástico veneno que la abeja elabora. Y, mientras tanto, ella, desde su cálido bosque en el viento, intenta adivinar la extraña miel que, lentamente, en lo oscuro, obra el escorpión.

(Ernesto Santana)

martes, 11 de septiembre de 2012

el teléfono es un gato que sueña con tener hijos

1) ¿Sí, aló? 2) Hola Rafo, ¿por qué no llamas nunca? No has venido desde hace un mes, ni siquiera sabes cómo estamos. 3) ¿Cómo están? 4) No te burles, Rafo, ¿hasta cuándo piensas hacernos sufrir? 5) Hasta noviembre. 6) ¿Cómo, hasta noviembre? 7) En noviembre me mato. 8) (sollozos, pañuelo menudo en narices) Malo, eres muy malo. 8) Bueno, voy a colgar. 9) Perverso, matarse en noviembre sabiendo muy bien que la Nena se casa el 5 de diciembre. Nos vas a hundir, ya lo estoy viendo (sollozos, hipos, mismo pañuelo). 10) Chau, mamá, están golpeando a la puerta con un hacha.

(Huilo Ruales Hualca)

jueves, 12 de julio de 2012

de la escena del odio

Tu máximo es ser bestia y tener bigote.

                                                             (José de Almada Negreiros)

domingo, 8 de julio de 2012

aquí

No sé cómo será en otras partes
pero aquí en la tierra hay bastante de todo.
Aquí se fabrican sillas y tristezas,
tijeras, violines, ternura, transistores,
diques, bromas, tazas.
Puede que en otro sitio haya más de todo,
pero por algún motivo no hay pinturas,
cinescopios, empanadillas, pañuelos de lágrimas.
Aquí hay un sinfín de lugares con sus alrededores.
Algunos te pueden gustar especialmente,
puedes llamarlos a tu manera,
y librarlos del mal.

Puede que en otro sitio haya lugares así,
aunque nadie los encuentra bonitos.

Quizá como en ningún sitio, o en pocos sitios,
aquí tengas un torso separado
y con él los instrumentos necesarios
para añadir los propios a los niños de otros.
Y además brazos, piernas y una cabeza sorprendida.

La ignorancia tiene aquí mucho trabajo,
todo el tiempo cuenta, compara, mide,
saca de ello conclusiones y raíces cuadradas.
Ya, ya sé lo que estás pensando.
Aquí no hay nada duradero,
porque desde siempre hasta siempre
está en manos de los elementos.
Pero date cuenta: los elementos se cansan rápido
y a veces tienen que descansar mucho
hasta la próxima vez.

Y sé qué más estás pensando.
Guerras, guerras, guerras.
Pero incluso entre las guerras a veces hay pausas.
Firmes –la gente es mala.
Descansen –la gente es buena.
A la voz de firmes se produce devastación.
A la voz de descansen se construyen casas sin descanso
y rápidamente se habitan.

La vida en la tierra sale bastante barata.
Por los sueños, por ejemplo, no se paga un céntimo.
Por las ilusiones, sólo cuando se pierden.
Por poseer un cuerpo, se paga con el cuerpo.

Y por si fuera poco,
giras sin billete en un carrusel de planetas
y junto a éste, de gorra, en un torbellino de galaxias,
en unos tiempos tan vertiginosos
que nada aquí en la Tierra llega ni siquiera a moverse.

Porque mira bien:
la mesa está donde estaba,
en la mesa una carta, colocada como estaba,
a través de la ventana un soplo solamente de aire,
y en las paredes ninguna terrorífica fisura
por la que el viento te lleve a ninguna parte.

(Wisława Szymborska)

miércoles, 4 de julio de 2012

porque sueño

Porque sueño, yo no lo estoy, porque sueño, sueño, porque me abandono por las noches a mis sueños, antes de que me deje el día. Porque no amo, porque me asusta amar, ya no sueño, ya no sueño. Ya no sueño, ya no sueño, ya no sueño, ya no sueño. A ti, la Dama, la audaz melancolía que con grito solitario hiendes mis carnes ofreciéndolas al tedio, tú que atormentas mis noches cuando no sé qué camino de mi vida tomar, te he pagado cien veces mi deuda. De las brasas del ensueño solo me quedan las cenizas de una sombra, de la mentira que tu misma me habías obligado a oír. Y la blanca plenitud no era como el viejo interludio, y sí una morena de finos tobillos que me clavó la pena de un pecho punzante en el que creí, y que no me dejó más que el remordimiento de haber visto nacer la luz sobre mi soledad. E iré a descansar, con la cabeza entre dos palabras, en el valle de los avasallados.

(Réjean Ducharme:
El valle de los avasallados)

martes, 3 de julio de 2012

cuando

cuando
las serpientes negocien su derecho a retorcerse
y el sol brille para ganarse un jornal decente
cuando las espinas miren sus rosas con alarma
y el arco iris adquiera un plan de pensiones

cuando
cada tordo no pueda cantar a la luna nueva
si antes todas las lechuzas su voz no aprueban
y sobre la línea de puntos las olas tengan que firmar
para que el océano no se vea obligado a cerrar

cuando
el roble para dar bellotas pida permiso al abedul
cuando los valles acusen a sus montañas de altitud
y marzo denuncie a abril de sabotaje

entonces
creeremos
en esa mentira de humanidad inanimal
(sólo entonces)

(E. E. Cummings:
Xaipe, 1950, traducción-perversión)

viernes, 22 de junio de 2012

aclaraciones

todo tiene un significado
todo ha sido meticulosamente
preparado para la gran hora
todo está roto a la perfección

(Fernando Merlo)

domingo, 17 de junio de 2012

no es posible dormir

No es posible dormir
cuando la noche, presentida
en el fondo de las venas,
agarra en las paredes sus tentáculos
y no te deja oír ni tan siquiera
el silencio.

Es triste una boca cerrada,
como es triste ver a un niño sudar sangre
porque le han robado sus pulmoncitos
y no puede respirar;
en la tristeza existen muchas partes,
y tal vez una de ellas te caiga
mañana en tu plato de sopa
mientras comes.

Hay que gritar, amigo, y gritar tanto
que el grito petrificado de los muertos
sea igual al tuyo.
Entonces todos juntos, como una
enorme masa de carneros,
nos lanzaremos contra el mal.

Y venceremos.

(Fernando Merlo: Escatófago)

viernes, 1 de junio de 2012

masa

Al fin de la batalla,
y muerto el combatiente, vino hacia él un hombre
y le dijo: «¡No mueras; te amo tanto!».
Pero el cadáver ¡ay! siguió muriendo.

Se le acercaron dos y repitiéronle:
«¡No nos dejes! ¡Valor! ¡Vuelve a la vida!».
Pero el cadáver ¡ay! siguió muriendo.

Acudieron a él veinte, cien, mil, quinientos mil,
clamando: «¡Tanto amor, y no poder nada contra la muerte!».
Pero el cadáver ¡ay! siguió muriendo.

Le rodearon millones de individuos
con un ruego común: «¡Quédate hermano!».
Pero el cadáver ¡ay! siguió muriendo.

Entonces, todos los hombres de la tierra
le rodearon; les vio el cadáver triste, emocionado;
incorporóse lentamente,
abrazó al primer hombre; echóse a andar...

(César Vallejo)

jueves, 31 de mayo de 2012

del tacto fervoroso

DESASIMIENTO

MI corazón de farsante
dio ya todo lo que es dable.

Me queda: la úlcera roja
de mi pensamiento.

La úlcera verde
de mi sensibilidad remota.
Un espejo.
Mi vida de siempre.

Lo que doy, si alguien lo quiere.

(Juan José Domenchina)

de neurastenia

UNA VOZ

(LA taquicardia martillea
—remedo agónico de vida.
En el garrote, la disnea
apaña el dogal homicida).

—Amigo, es hora de ser fuerte.
Es hora de claudicar.
No hay más dios —¡dilo!— que la muerte
—descomponerse, descansar.

Pero si no tienes el ánimo
propicio a tal desasimiento...
Espera de Dios, que es magnánimo,
la eternidad del sufrimiento.

(Juan José Domenchina)

sábado, 19 de mayo de 2012

autorretrato

Soy una mano. La mano es un instrumento. Soy, por lo tanto, un instrumento. Un instrumento para exteriorizar y captar las emociones (no soy, pues, un instrumento de trabajo). En la palma de mi alma están incisas las líneas de la vida. de vez en cuando me sitúo delante de un espejo y leo esas líneas. Hace tiempo que esta actividad perdió para mi el componente narcisista ansioso. Soy una víctima del tactilismo. Tengo demasiadas zonas erógenas para un solo cuerpo. Nunca trabajo, y sin embargo, mis dedos se mueven continuamente, incluso cuando duermo. Se contraen, se abren, se entrecruzan y en ocasiones cambian de lugar. De cuando en cuando se esfuerzan por decir algo a los sordomudos que les circundan. Lo más a menudo en vano. Nadie quiere comprender el lenguaje de los signos, el lenguaje no verbal, que sin embargo es el único lenguaje capaz de expresar la polisemia de las cosas y los hechos, pues brota de las fuentes inextinguibles de la imaginación. Para nuestra civilización es una lengua de incivilizados, de psicópatas e inválidos, ya que no se puede sacar partido económico de ella.

Soy una mano con seis dedos palmeados. En lugar de uñas tengo pequeñas lenguas puntiagudas y glotonas con las que lamo el mundo.

(Jan Švankmajer: Para ver, cierra los ojos.
Pepitas de calabaza ed.,  2012)

lunes, 14 de mayo de 2012

punto de referencia

No a la arena y a su soltura
no a los pies dispuestos a la persecución
no a un techo más cálido que otro
no a la noche perforada detrás de la oreja
no a los guijarros heroicos a las capas de polvo
no a la llamada de oro adulterado de las dudas
no a los adioses a las mentiras a las reconciliaciones
a todo lo que no sea asegurarme
que ni tú ni yo hemos existido nunca

(Juan Larrea)

la que concibe mis esperanzas

Pobre animal su lengua no llegará nunca a disipar la niebla
está sin acabar como una iglesia
está ahuecada y triste
sus ojos vacíos pesan menos que sus tinieblas
su única mariposa es la superficie de su leche

(Juan Larrea)

jueves, 3 de mayo de 2012

el monstruo de la escalera

Me topé con un monstruo en la escalera. Sus dificultades para subirla hacían, al mirarlo, un daño atroz.

Y no obstante sus muslos eran formidables. Hasta se podría decir que era todo muslos. Dos ponderosos muslos encima de patas de plantígrado.

La parte superior no la vi distintamente. Bocas menudas de sombra, ¿de sombra o de...? Ni cuerpo tenía en realidad el monstruo, excepto ese conjunto de zonas mollares y confuso trasudor que basta para tentar al sexo soñador de algún varón ocioso. Pero acaso no se trataba de esto en absoluto, y el enorme monstruo, probablemente hermafrodita, subía —desdichado, aplastado y bestial— una escalera que sin duda no le llevaría a ninguna parte. (Aunque me dio la impresión de que no había emprendido la ascensión por unos pocos escaloncitos).

Su aspecto desazonaba, y de seguro no era buena señal topar con semejante monstruo.

De que era inmundo uno se percataba enseguida. ¿Por qué? No sabría decirlo.

Parecía llevar en su bulto indefinido lagos, lagos pequeñísimos, ¿o bien eran párpados, inmensos párpados?

(Henri Michaux: Adversidades, exorcismos)

martes, 3 de abril de 2012

los colmillos de saturno

I

Sólo los niños
conocen el Horror

Nunca olvidan
que debajo de su piel
está escondido un esqueleto

Son sus camas ataúdes
incendiados por los dedos
de la noche

Barquitos siniestros navegando
dando vueltas en los ojos del zombi
infinitas rutas de sangre
en la espalda descarnada
de un océano diabólico

Barquitos las camas de los niños
recorriendo el laberinto de tuberías
que une los sueños
con la muerte

(Ricardo Bernal: Ciudad de telarañas)

lunes, 26 de marzo de 2012

hueso en flor

bajo la luz de hueso
de la luna
y en la oscuridad
empapada de estrellas
de cama
en cama
siempre
entrelazados
como dos iniciales
que entintara la noche
para imprimirnos en el sueño

y hoy
en el silencio
que atraviesa un grifo cojeando
con más ruido
que el planeta al girar

en la tibieza del animal cansado
cuyo lenguaje es gemir y apretarse
formar un hueco
donde el otro quepa

en esta ahora en que reza el creyente
el ofendido lame sus heridas
y el viajero se cree de vuelta a casa

en esta ahora no imagino nada
no quiero más

cuanto esperé de vivir
vino a tu lado

cierro los ojos
sin miedo a no volver

estoy cumplido en ti
estoy dormido

(José María Parreño: Poemas de amor y no)

viernes, 9 de marzo de 2012

el último poema (30): la carta

Todas las mañanas llego a la oficina, me siento, enciendo la lámpara, abro el portafolio y, antes de comenzar la tarea diaria, escribo una línea en la larga carta donde, desde hace seis años, explico minuciosamente las razones de mi suicidio.

(Luis Mateo Díez: Piezas sueltas)

jueves, 23 de febrero de 2012

el ser indiferente nada es

VI

Las palabras del poema, su indocilidad, su número, su insignificancia, conservan en el corazón el instante impalpable, beso lentamente posado en la boca de una muerta, dejan el aliento suspenso en lo que ya nada es.

La transparencia del ser amado, milagrosa indiferencia, lo que extravía, extraviado en el cristal incontable de la luz: no pensar en ello nunca más.

(Georges Bataille)

el mal

…fiesta a la que me invito solo, donde rompo a más no poder el lazo que me liga a los demás. No tolero ninguna fidelidad a ese lazo. Cualquiera que ame está obligado a romperlo. El acto de amor cabal consistirá en ponerme desnudo por la noche, en la calle, no por una mujer retrasada sino por un imposible, a vivir yo solo en un silencio seguro. Haría allí lo inconfesable, diferente de lo que puedo decir con alguna insignificancia vulgar en lo que no se pensaría. Podría defecar, acostarme encima y llorar. Avergonzaría incluso a quien se jacta de entenderme –que no me imagine vulgar–. No quiero ni gozar ni asquearme, y sin embargo...

Los ojos abiertos desmesuradamente, contemplar el cielo, las estrellas, en el estado de inocencia.

Ser una mujer trastornada, desnuda, los ojos en blanco. Sueño de ausencia y no de placer. Ausente ella, es todavía más el mal lo que ansío gozar, el mal, la necesidad de negar el orden sin el cual no se podría vivir.

Los hombres se desconocen en el bien y se aman en el mal. El bien es la hipocresía. El mal es el amor. La inocencia es el amor del pecado.

Interesado, el mal es un bien para el malhechor. El mal auténtico es desinteresado.

En lo que tiene de íntima, de dulce, de desinteresada, la sociedad reposa sobre el mal: es como la noche, hecha de angustia.

(Georges Bataille: El pequeño)

viernes, 10 de febrero de 2012

el muerto y la luna

Un anciano ve un muerto sobre el que caía la claridad de la luna. Reúne gran número de animales y les dice:

—¿Cuál de vosotros, valientes, quiere encargarse de pasar el muerto o a la luna a la otra orilla del río?

Dos tortugas se presentan: la primera, que tiene las patas largas, carga con la luna y llega sana y salva con ella a la orilla opuesta; la otra, que tiene las patas cortas, carga con el muerto y se ahoga.

Por eso la luna muerta reaparece todos los días, y el hombre que muere no vuelve nunca.

(Blaise Cendrars: Antología negra)

viernes, 20 de enero de 2012

pantera

Dicen que para vencer el insomnio es indispensable, de un solo golpe, dividir con el cuchillo de la vigilia el corazón de la bestia en dos mitades exactas.

Determinado la enfrento.

De rodillas frente a ella hundo el cuchillo en mi pecho. ¿Quién puede saber dónde tiene el corazón esa pantera?

(Edilberto Aldán)

sábado, 14 de enero de 2012

fragmento

Custodiado por esfinges de cristal, un tesoro persa aguarda vanamente en las profundidades de mi cerebro. Ejércitos de caballeros humeantes, montados en osamentas de potros, lo dejaron ahí: para hostigar mi codicia todas las noches. Las esfinges, posadas a cada extremo de un sepulcro dividido por una escalinata que conduce a donde está el tesoro, vigilan la ascensión de seres amortajados. A sus pies brilla un césped cuajado de rocío: el parque de las ninfas. Hay alamedas a lo lejos, amores de bronce y en medio del jardín un fáustico reloj, mudo para siempre. Yo frecuento con pasitos de rata los senderos de grava, sólo por el placer de pisar arena imaginaria. Mientras camino, advierto una lluvia incipiente. No se me ocurre nada: estoy absorto, contemplando esa luna de plata que brilla junto al sol.

De pronto, el cielo se quiebra como un espejo.

(Emiliano González: Los sueños de la bella durmiente)

jueves, 5 de enero de 2012

LXII

Cráneo desfigurado
Por el hambre de los muertos
Que sólo saben del ser y de la nada
De los muertos que ya no hablan de la agonía
Y el cadáver incendia la luz de la tarde
Oh vida, gran prostituta
Oh barco de «Nunca Jamás»
En el que se dice «Nunca más» al poema
Nunca más a mi frente.

(Leopoldo María Panero: Cantos del frío.
Casus-Belli, 2011)

domingo, 1 de enero de 2012

derrota

Yo que no he tenido nunca un oficio

que ante todo competidor me he sentido débil

que perdí los mejores títulos para la vida

que apenas llego a un sitio ya quiero irme (creyendo que mudarme es una solución)

que he sido negado anticipadamente y escarnecido por los más aptos

que me arrimo a las paredes para no caer del todo

que soy objeto de risa para mí mismo

que creí que mi padre era eterno

que he sido humillado por profesores de literatura

que un día pregunté en qué podía ayudar y la respuesta fue una risotada

que no podré nunca formar un hogar, ni ser brillante, ni triunfar en la vida

que he sido abandonado por muchas personas porque casi no hablo

que tengo vergüenza por actos que no he cometido

que poco me ha faltado para echar a correr por la calle

que he perdido un centro que nunca tuve

que me he vuelto el hazmerreír de mucha gente por vivir en el limbo

que no encontraré nunca quién me soporte

que fui preterido en aras de personas más miserables que yo

que seguiré toda la vida así y que el año entrante seré muchas veces más burlado en mi ridícula ambición

que estoy cansado de recibir consejos de otros más aletargados que yo («Ud. es muy quedado, avíspese, despierte»)

que nunca podré viajar a la India

que he recibido favores sin dar nada en cambio

que ando por la ciudad de un lado a otro como una pluma

que me dejo llevar por los otros

que no tengo personalidad ni quiero tenerla

que todo el día tapo mi rebelión

que no me he ido a las guerrillas

que no he hecho nada por mi pueblo

que no soy de las FALN y me desespero por todas estas cosas y por otras cuya enumeración sería interminable

que no puedo salir de mi prisión

que he sido dado de baja en todas partes por inútil

que en realidad no he podido casarme ni ir a París ni tener un día sereno

que me niego a reconocer los hechos

que siempre babeo sobre mi historia

que soy imbécil y más que imbécil de nacimiento

que perdí el hilo del discurso que se ejecutaba en mí y no he podido encontrarlo

que no lloro cuando siento deseos de hacerlo

que llego tarde a todo

que he sido arruinado por tantas marchas y contramarchas

que ansío la inmovilidad perfecta y la prisa impecable

que no soy lo que soy ni lo que no soy

que a pesar de todo tengo un orgullo satánico aunque a ciertas horas haya sido humilde hasta igualarme a las piedras

que he vivido quince años en el mismo círculo

que me creí predestinado para algo fuera de lo común y nada he logrado

que nunca usaré corbata

que no encuentro mi cuerpo

que he percibido por relámpagos mi falsedad y no he podido derribarme, barrer todo y crear de mi indolencia, mi flotación, mi extravío una frescura nueva, y obstinadamente me suicido al alcance de la mano

me levantaré del suelo más ridículo todavía para seguir burlándome de los otros y de mí hasta el día del juicio final.

(Rafael Cadenas)